Pedagogía Waldorf en Tenerife

Waldorf, una pedagogía centrada en el niño y sus ritmos de aprendizaje, donde el trabajo manipulativo y artístico son la clave para el desarrollo del menor.

A la hora de trabajar dentro de un aula es importante estar formados en las metodologías más actualizadas y beneficiosas para la enseñanza y el aprendizaje, ya que esto también contribuye a comprender mejor el proceso de crecimiento y madurez de un individuo. En este post analizamos el método Waldorf, una pedagogía centrada en el niño y sus ritmos de aprendizaje, donde los trabajos manipulativos y artísticos son la clave.

Este tipo de metodologías más activas suponen una reforma de los paradigmas de la educación tradicional, que desembocan en la creación de una educación con un currículo más abierto y flexible adaptado al propio alumnado.

¿Qué es la

pedagogía Waldorf?

La metodología Waldorf es una técnica de enseñanza que nace en las premisas establecidas por Rudolf Steiner. Esta pedagogía está basada en la libre instrucción por parte de los alumnos, es decir, que sean autónomos a la hora de ir realizando y adquiriendo los conocimientos a lo largo del propio proceso educativo.

Esta metodología fomenta sobre todo el grupo cooperativo entre los estudiantes, centrando en cada etapa educativa diferentes hipótesis de trabajo y enseñanza, que los alumnos irán adquiriendo de forma paulatina cuando estén preparados para asimilar dichos conceptos. En este caso, el docente es el encargado de ir observando a los niños y niñas en todo momento para ir introduciendo los conocimientos que precisen en cada una de las diferentes etapas educativas, fomentando en cada una de ellas las materias de arte, música y trabajos más artesanales y manipulativos.

0-6 años:

Primera etapa educativa

La pedagogía Waldorf incluye el juego como motor principal para el propio aprendizaje, activando en el estudiante capacidades sumamente importantes, como son la creatividad o el juego simbólico y libre, y centrándose en aspectos del desarrollo evolutivo como la psicomotricidad.

7-12 años:

Educación primaria

La pedagogía Waldorf incluye el juego como motor principal para el propio aprendizaje, activando en el estudiante capacidades sumamente importantes, como son la creatividad o el juego simbólico y libre, y centrándose en aspectos del desarrollo evolutivo como la psicomotricidad.

13-16 años:

Educación secundaria

La pedagogía Waldorf incluye el juego como motor principal para el propio aprendizaje, activando en el estudiante capacidades sumamente importantes, como son la creatividad o el juego simbólico y libre, y centrándose en aspectos del desarrollo evolutivo como la psicomotricidad.

¿Qué ventajas tiene?

Una de las ventajas más importantes de la pedagogía Waldorf es que parte siempre del propio momento del desarrollo en que se encuentra la persona para potenciar el aprendizaje más idóneo, abarcando todas las dimensiones del conocimiento.

Además, esta metodología se centra en el propio alumno y en lo que quiere aprender, en la investigación, la manipulación, el fomento de las capacidades y desarrollos evolutivos de los estudiantes y, sobre todo, en una reforma de los paradigmas tradicionales.

Así pues, esta metodología fomenta que los docentes partan de los intereses del alumnado para llevar a cabo sus intervenciones educativas, respetando sus ritmos de aprendizaje y desarrollo.

Al “evaluar” sin necesidad de exámenes o pruebas escritas, sino utilizando otros métodos, el profesorado no está impartiendo la materia de forma que vaya ser examinada solo parte de la misma o preparando a los estudiantes para dicha prueba; más bien, activa la potencialidad de las capacidades que el niño tenga en cada una de las materias o áreas del conocimiento. Lo que se propicia con ello es que dichas competencias se desarrollen de una forma más óptima para el aprendizaje y crecimiento.

Es aquí donde radica la importancia de la formación y el conocimiento por parte de los docentes de las metodologías activas e integrales. La meta es impartir una enseñanza que motive al alumnado, consiguiendo que se sienta integrado en el propio proceso. Por ello, UNIR ofrece el Máster oficial en Métodos de enseñanza en educación personalizada que ayuda al profesorado a conocer las metodologías más activas y adecuadas para potenciar las capacidades del alumnado.

¿Qué métodos de la Pedagogía Waldorf

se emplean en el aula?

Los métodos de enseñanza relacionados con esta pedagogía parten siempre del juego, la propia búsqueda, la experimentación… Para ello, se realizan talleres en grupos cooperativos, proyectos, temas de investigación, aprendizajes de un área en concreto… Sin olvidar que la base de la pedagogía Waldorf radica en la cultura de las artes como método para inculcar la creatividad y favorecer el desarrollo de las personas a lo largo de su vida. Para lograr dicho cometido se plantean actividades en talleres más relacionadas con tareas artesanales, como la carpintería, la experimentación con elementos de distintos tipos (agua en sus diferentes estados, aceite…), el cuidado del propio espacio, el cultivo de un huerto…

Con la metodología Waldorf se cambia el paradigma educativo tradicional que supone un aprendizaje más memorístico basado en libros de textos y elaboración de ejercicios más técnicos y menos creativos. ¿El objetivo final? Que cada alumno consiga sacar el máximo potencial de sus capacidades.

El Moral, centro de formación

infantil respetuoso con el desarrollo

El Centro Infantil Waldorf Finca El Moral situado en Santa María, en Santa Cruz de Tenerife, ofrece un espacio pedagógico dentro del círculo Waldorf en Canarias. Para niños y niñas de 0 a 6 años. 

En Finca El Moral creemos firmemente en el impulso a las iniciativas pedagógicas alternativas a través del desarrollo de la comunidad educativa y de la oferta formativa. Para ello apostamos por este proyecto de la escuela infantil basándonos en acoger la filosofía de Waldorf-Steiner y posicionarnos como un centro de pedagogía Waldorf en Tenerife. El panorama canario de enseñanza y formación se ve enriquecido con ofertas educativas como esta que permiten iniciativas pedagógicas libres.

Toda la comunidad puede contar con presencia y colaboración en las actividades y próximos eventos del centro. De esta forma se acoge a niños y niñas en una formación integrativa que les permite desarrollarse no solo gracias al amparo y esfuerzo del propio centro, sino también gracias al interés y apoyo de madres, padres, abuelos y resto de la comunidad que forma parte de su crianza.